Este lunes, en el Instituto Altamira, se concretó una entrega de anteojos y una nueva jornada de controles oftalmológicos a niños de los diferentes jardines maternales de la ciudad, en el marco del Programa “Veo Veo”, que lleva adelante el Municipio, a través de las carteras de Salud y Desarrollo Humano y Familia, junto a Pan American Energy, Fundación Crecer y la mencionada institución médica.
En ese contexto, desde el inicio del programa, se controlaron 120 niños de las salas de 3 años de los jardines maternales Los Grillitos, 30 de Octubre, Jorge Newbery, Presidente Ortiz y San Martín, de los cuales 25 ya tuvieron su consulta con los especialistas y, este lunes por la tarde, tres recibieron sus anteojos de material irrompible.
Al respecto, el secretario de Salud, Carlos Catalá, indicó que “la idea es avanzar en todos los ejes relacionados con la primera etapa del aprendizaje, para lo que es fundamental la visión, la audición y lo neurológico, articulando con la Fundación Crecer, el Instituto Altamira y PAE”.
En ese sentido, explicó que “la propuesta consiste en una primera entrevista, se completa una ficha y, ante indicios de que el niño necesite una consulta con el oftalmólogo, la misma se lleva a cabo con profesionales del Instituto. Finalmente, se entregan los anteojos a quienes presenten algún inconveniente que requiera su uso. Además, los docentes de los jardines adquieren conocimientos sobre el tema y pueden colaborar en la detección de problemas visuales”.
“Los chicos van a continuar con los controles, así hayan finalizado la etapa de jardín de infantes, porque el objetivo es que el programa tenga no menos de 4 años de continuidad. No queremos que, por alguna razón, el año que viene no puedan acceder a la consulta con el oftalmólogo”, sostuvo.
En esa línea, Catalá señaló que “es importante trabajar en conjunto con entidades privadas por el bien de la comunidad. El Estado no puede cubrir todas las cuestiones, así como tampoco la parte privada. Lo que no tenemos, debemos gestionarlo a través de empresas o instituciones privadas”.
“Los padres nos facilitan el trabajo”
Por su parte, la referente del Instituto Altamira, Solange Freile, afirmó que “empezamos a elaborar este programa en enero de este año y, apenas comenzaron las clases en los jardines maternales, iniciamos las visitas y los controles. Trabajamos aproximadamente 120 niños de 3 años, de los cuales 25 ya asistieron a la consulta y tres ya recibieron sus anteojos. Vamos generando turnos para atenderlos a todos y empezamos por los que, en la historia clínica o a simple vista, detectábamos una dificultad”.
“La labor se hizo fácil, porque tanto los padres, como los docentes y directivos de los jardines maternales, colaboraron con nosotros. Los padres llenaron las fichas y nos brindaron toda la información necesaria, mostrando un gran interés en esta propuesta”, concluyó Freile.
