El intendente Juan Pablo Luque y su equipo de gobierno
cumplieron su
primer semestre de gestión. Un período que se había planteado para
empezar a fijar el plan de gobierno proyectado, cuando la pandemia
cambió completamente los ejes. Sin embargo, el desafío le permitió al
mandatario demostrar su capacidad al momento de tomar decisiones
difíciles y enfrentar algo desconocido en todo el mundo.
“Hemos tenido que pasar seis meses totalmente atípicos respecto a lo que
una persona en cualquier lugar del mundo hubiera considerado como una
gestión de gobierno. Nadie tenía en los planes vivir una situación como
la que estamos viviendo, que ha hecho modificar el plan de gobierno que
teníamos pensado. Fueron seis meses que parecieron dos años de gestión,
por la intensidad y por importancia que tiene para nosotros cuidar a
nuestra gente».
«Lo que hemos priorizado ha sido cuidar a los comodorenses, e invertir
en cuestiones esenciales. Ojalá que el día de mañana la comunidad sienta
que ha sido así”, expresó Juan Pablo Luque resumiendo el enorme desafío
que le tocó enfrentar a partir de marzo y que cambió completamente el
eje de la primera etapa de gobierno.
El 2 de marzo, durante la apertura de sesiones del Concejo Deliberante,
Luque anunciaba su ambicioso plan de gobierno que incluía la impronta de
un Estado descentralizado, basado en la innovación tecnológica, y con
ejes concretos enfocados en la planificación de la ciudad con la idea de
un Comodoro Habitable desde los servicios, los espacios públicos, la
obra pública y el desafío productivo con dos ejes: diversificación,
forestación y turismo. Al día siguiente se dio a conocer el primer caso
de coronavirus en Argentina y dos semanas después, el presidente de la
Nación decretaba la cuarentena obligatoria social y preventiva en todo
el territorio.
En ese marco, el intendente recordó que “habíamos preparado durante
muchos meses un plan para transformar Comodoro y cuando terminamos de
acomodar cada secretaría y estuvimos listos para encararlo, apareció
este flagelo que venía afectando a otras partes del mundo, pero lo
veíamos lejano todavía en nuestro país. No solo el plan de gobierno
quedó en un paréntesis momentáneo, sino que repentinamente tuvimos que
actuar al ritmo del avance del virus en Argentina, ante la posibilidad
siempre latente de que podía ingresar en Comodoro”.
“Lo más importante que tuvimos al principio fue tratar de llegar a cada
una de las personas que tenía una necesidad. Donde había una necesidad
estaba el Municipio, con alimento, con leña, con prevención en salud,
con créditos para pymes”, agregó.
Entre el cuidado de la población y la reactivación económica
Durante la cuarentena el municipio no solo mermó notablemente en su
recaudación -propia y por recursos externos por la situación petrolera-
sino que además se vio obligado a invertir mucho dinero en la prevención
para evitar o atenuar el impacto del virus si entraba a la ciudad.
“Fueron unos 120 millones los que aportó el municipio en materia de
alimentos para los sectores más impactados; insumos y equipamiento
sanitario como elementos de protección persona -para los hospitales y
centros de salud de la ciudad-, algunos muy importantes como el equipo
PCR que nos permitió hacer testeos rápidos sin necesidad de enviar y
esperar el resultado desde Buenos Aires. Esta última semana también
donamos equipamiento tecnológico para cuidar más a nuestros
profesionales de la salud; y reconstruimos un sector del Hospital Alvear
que fue un gran aporte de este Municipio”. En la inversión general
también se encuentran los 30 millones de pesos en materia de créditos
para pymes y comercios afectados durante la cuarentena, que ayudó a
conservar más de 300 puestos de trabajo.
Además, se tomó la decisión de retomar el plan de obra pública prevista
en cuanto a la infraestructura más importante, que además permitió
reactivar 600 puestos laborales. Hasta el momento, y pese a la pandemia,
la gestión pudo terminar 50 obras que habían comenzado el año pasado y
poner en ejecución 63 nuevas. “No nos hemos quedado con la pandemia.
Hemos tratado de sacar a la ciudad adelante desde el punto de vista
productivo, de la generación de puestos de trabajo. Y en ese sentido no
tengo dudas de la potencialidad que tuvimos para poner a la ciudad en
movimiento rápidamente y haber logrado continuidad de obras”.
Trabajo conjunto entre gobiernos y fuerzas para prevenir la pandemia
Para el intendente, no hubiesen podido salir adelante sin «un compromiso
fundamental de cada uno de los actores de este gobierno. El grupo de
trabajo ha tenido una gran condición humana para enfrentar esta
situación y estoy muy orgulloso”, resaltó sobre su gabinete.
“Otro de los aspectos positivos es sin dudas el trabajo regional que se
forjó, sintiendonos realmente acompañados por un gobierno nacional que
conoce la realidad de la ciudas, y con los intendentes de la región,
como Luis Juncos, con quien trabajamos todo el tiempo sobre las medidas
en conjunto para evitar confusiones entre las dos ciudades”, destacó el
intendente.
En ese marco, puso en valor la formación del comité sanitario que
“permitió revalorizar el nivel de profesionales que tenemos en la
ciudad, con inmensa capacidad para enfrentar cualquier contingencia, a
quienes les dimos toda la confianza para que actúen y para que nos
asesoren porque ninguno está realmente preparado para algo de
desconocimiento incluso mundial”, valoró Luque.